Imagina que, al momento de empezar la contingencia, tu jefe llega a tu oficina y te dice que empaques tus cosas, todos se van despedidos.

Claro que esto no ocurrió. Aunque muchas empresas están considerando cerrar y el pronóstico no es alentador, un porcentaje importante de los negocios continúan laborando a través de una modalidad mixta, lo cual ha salvado una gran cantidad de empleos.


Trabajar con dos oficinas


Una modalidad mixta o semipresencial es cuando el colaborador trabaja desde casa unos días y en la oficina otros días. ¿Han recurrido a esta modalidad en tu trabajo? Si bien es cierto que algunos jefes son escépticos ante los beneficios y la productividad de sus colaboradores en casa, empresas importantes han preparado el camino a seguir.

Una de las compañías que incentivó el tránsito a esta modalidad fue Microsoft, como expresó Brad Smith en una entrevista con Fast Company, uno de sus objetivos era crear el momentum para que otras empresas siguieran sus pasos, ya que se trataba de un camino incierto y desconocido para muchos.

Gracias a este cambio de paradigma, cada vez más empresas optan por trabajar desde casa o mínimo aplicar una modalidad mixta. Esto causa algunos inconvenientes y problemas, sin embargo, es posible superar estos retos.


Los retos de la modalidad mixta

Antes la modalidad mixta se reservaba casi exclusivamente para trabajos como periodista, redactor y vendedor. Sin embargo, muchas compañías se vieron obligadas a recurrir a esta forma de trabajo para sobrevivir, era eso o hacer un despido masivo que finalmente no llevaría a nadie a un puerto seguro.

Esta modalidad ha tenido algunos tropiezos debido a que, tanto colaboradores como líderes, han tenido que adaptarse. Sin embargo, en estos últimos meses se ha comprobado que la humanidad se puede acostumbrar a lo que sea. Hay 2 retos principales que es necesario resolver: la definición de un espacio de trabajo y las horas laborales.


1. Espacio de trabajo

Si tienes niños pequeños, trabajar desde casa puede volverse algo verdaderamente estresante, ya que ahora tienes dos jefes: uno en traje y otro en pañales. Uno piensa que no haces nada desde casa y el otro piensa que debes prestarle toda tu atención porque estás ahí.

Encontrar por lo menos un rincón en tu casa que sirva de oficina de repuesto es complicado. La solución casi siempre consiste en secuestrar un área común, como el comedor o la sala, y bautizarla como tu oficina. Al ser un área común, podrías estar en una llamada importante y tus hijos gritando de fondo o volverte viral si pasa algo gracioso y queda captado en tu videollamada como tantos videos nuevos en la web.

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En Technology HUB puedes conseguir espacios de trabajo que se adapten a esta modalidad, tal es el caso del área de cowork y los T-HUB Desk. Con tu membresía, puedes hacer uso de tu espacio cuando te sea necesario y trabajar desde casa cuando puedas o incluso alternar los días. Cotiza aquí.


2. Horarios de oficina

Si estás en tu casa, estás disponible. ¿O no? Otro reto importante que superar es el establecimiento de un horario riguroso que ambas partes respeten. Cuando ese reloj da la hora de salida, la oficina ya no existe, no importa en donde estés.

Claro, el colaborador siempre atenderá urgencias fuera del horario y el jefe entenderá que a veces puedes tener un asunto urgente en el baño de vez en cuando. Se trata de que ambos sean comprensivos con el otro.

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Si tienes juntas esporádicas o inesperadas, tu horario se puede ver todavía más alterado. Por ejemplo, puedes decidir ir lunes, miércoles y viernes a la oficina, pero resulta que tienes junta presencial el martes. Tendrás que adaptar tu horario, por eso es bueno contar con un espacio de trabajo que siempre esté disponible para ti y tus reuniones, aunque trabajes desde casa.


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El tiempo y el espacio siempre serán un tema importante en los negocios. El cambio en ocasiones puede ser forzado, pero no es razón para no aprovecharlo y disfrutar los beneficios que una modalidad mixta trae a tu empresa.


¿Ya cuentas con esta modalidad?